Sorprendidos y tristes se encuentran los allegados a Richard, un niño de apenas 13 años que en una de las jugadas de las redes sociales se quitó la vida en el barrio La Esperanza del municipio de Turbana, norte de Bolívar, al parecer, por cumplir uno de los famosos retos o ‘challenge’, como se le conoce en ingles.
La dantesca escena fue descubierta por la abuela del menor, al rededor de las 9 de la noche del pasado 14 de mayo. La mujer lo halló colgado, con su uniforme de educación física del Colegio Marcos Fidel Suárez puesto y un celular que grabó todo lo ocurrido. Los alaridos de la señora alertaron a los demás familiares, quienes intentaron trasladarlo a un centro asistencial, pero era muy tarde, el cuerpo del pequeño se encontraba rígido (rigor mortis o rigidez de la muerte).
Este sería el segundo niño que lamentablemente se quita en siete días, en el barrio Blas de Lezo de la ciudad de Cartagena, otro pequeño también se ahorcó con una pijama en el baño de su casa.
Ahora IN, consultó por segunda vez a la psicóloga Inés Valle sobre el tema, explicando que durante este momento de cuarentena, los niños están expuestos a diversas problemáticas como el encierro prolongado, lo visible que se hacen los problemas de los adultos al estar tanto tiempo confinados con ellos, el estrés de las tareas, la nueva modalidad para recibir clases (virtuales), entre otras dificultades que deben ser atendidas por los padres o adultos responsables, por lo que recomendó momentos de esparcimiento en distintas áreas de la casa, dialogo constante, deportes o actividades físicas, reducir el tiempo frente a un celular o computadora y/o la implementación diversas actividades.
Esto es delicado !